El militarismo es una de las bases del sistema patriarcal y de dominación. Es la imposición por la fuerza de las condiciones de desigualdad, de explotación y de sometimiento a las jerarquías que ostentan el poder. El militarismo, al igual que el machismo, busca la sumisión total de sus víctimas, y antes de perder su poder sobre ellas no duda en recurrir al asesinato, aunque esto suponga su posterior suicidio. Su visión de las relaciones humanas es de enfrentamiento (amig@/enemig@, buen@/mal@). Desde esta concepción del mundo, la imposición del más fuerte y la guerra son medios aceptables para conseguir sus objetivos.
Las guerras son enfrentamientos entre oligarcas para mantener sus privilegios y seguir haciendo dinero mientras que los que mueren son siempre otras personas, casualmente las de las clases pobres y trabajadoras. Las guerras también potencian la desigualdad de género y disparan la violencia sexual y las violaciones.
No es cierto que las armas y los ejércitos garanticen la paz. Su función es la de matar y todo lo demás son engaños y manipulaciones para justificar su existencia y despliegue de medios. El gasto militar solo sirve para enriquecer a los fabricantes de armas y para mantener la desigualdad, mientras nos roba los recursos para los asuntos verdaderamente importantes.
Nosotras no queremos entrar en el ejército ni en las estructuras de poder patriarcal. Que haya mujeres en las instituciones machistas no las hace menos autoritarias.
Este 8 de marzo queremos remarcar, como anarcofeministas, nuestra insumisión al militarismo en todos sus aspectos, y haceros una propuesta de organización horizontal, sin autoritarismo, autogestionada, igualitaria y solidaria.
¡Contra sus guerras, nuestro apoyo mutuo!
¡Unidas somos mucho más fuertes!
Mañana 8 de Marzo, la CNT de León participará de la manifestación convocada en Guzmán a las 19h. con finalización en Botines. ¡A todxs lxs que participéis, nos vemos a la cola de la manifestación!
