Recientemente, entre las medidas gubernamentales ha destacado una, el nuevo sistema que se implantará en las empresas para el control de los fichajes de los trabajadores. Dicen que para evitar que las horas extras sigan siendo algo imposible de reconocer y por tanto de contabilizar en las empresas. A simple vista parece algo bueno, pero analicemos la situación con perspectiva.
Las horas extras están reconocidas en la legislación vigente como una medida excepcional en la que por razones organizativas y de producción puntuales una empresa puede pedir desarrollar, siempre de forma voluntaria y previo consenso con el trabajador, limitado a un número máximo anual y, por su puesto, remuneradas. Que las horas extras se han convertido en la norma y no en la excepción, no es un secreto para nadie; que un alto porcentaje de las empresas, exige la realización de dichas horas extras en lugar de consensuarlas con el trabajador, tampoco lo es; y que de ese alto porcentaje, un buen número de ellas las exigen sin la responsabilidad de remunerarlas es ya casi un axioma que se deja notar sobre todo en negocios como el de la hostelería.
Ahora bien, la medida que propone el gobierno, lo que produce, por una parte, es la normalización, más aún si cabe, de las horas extras. Con ello le están diciendo a las empresas: ¡Horas extras sí, pero finge que las registras!. Tras varias semanas con la medida implantada, se ha demostrado que dicho registro no funciona, y que los trabajadores, bajo amenaza de despido o sanción, falsean los datos para que no figuren en los dichosos registros las famosas horas extras. Por otra parte, y como punto mas importante, esta normalización de las horas extras está contribuyendo, no sólo a dar alas a que la explotación laboral se extienda, sino a que los niveles de desempleo continúen y aumenten, ya que los trabajadores que desarrollan dichas horas extras fuera de su jornada laboral impiden nuevas contrataciones.
Por lo tanto, desde CNT, manifestamos nuestra repulsa ante las mismas y nuestra disconformidad ante la medida gubernamental. E instamos a los trabajadores a que se organicen para luchar contra un sistema que contribuye a institucionalizar la explotación, y a la perpetuación del desempleo, y que no produce beneficios para nadie más que para los explotadores.
La solución a los bajos salarios y a la precariedad laboral no pasa por realizar más horas, sino por organizarse y reivindicar un salario suficiente. Si te obligan a falsear y te coaccionan para manipular el registro horario, que sepas que te puede traer consecuencias legales.
¿Quieres organizarte?. Pregúntanos cómo.
¡No seas cómplice de la decadencia laboral!. ¡Di NO a las horas extras!.
