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Y ya van tres, los días que el SOV de Santander se ha manifestado
frente al SOTO-BAR. Tres
dias de acción directa, tres días en los que, tanto los afiliados al
Sindicato como todos los simpatizantes y amigos de Roxana, han
asistido al lamentable espectaculo que ofrecen la empresa y su tropa de
«amigos».

Es triste, pero muy indicativo de la confusión y falta de
concienciación que vive la clase trabajadora. Si no fuera porque conocemos sobradamente la fauna local y a tanto
«ácrata» y «progre»  bocachancla que deambula por nuestras  calles,
podríamos habernos llegado a sorprender. De la gente que tenía intención de entrar al local, la abrumadora
mayoría, despues de hablar con nosotros, comprendió perfectamente que
este tipo de actitudes empresariales son inadmisibles, decidiendo
finalmente ir a otro bar.

Ha caido un autentico diluvio, pero hemos seguido allí. Nos han puesto
vallas, señales y obstáculos varios, nos han enviado a la policía, nos
han insultado desde una pobreza moral e intelectual que solo nos ha
provocado vergüenza ajena. Cada vez que nos han intentado provocar, 
han puesto en evidencia, el que a esta ciudad y a sus trabajadores les
hace, y les va a hacer más falta aún los metodos anarcosindicalistas de
la CNT.
 
Seguiremos estando allí donde los derechos de los trabajadores sean
vulnerados. Sean empresas grandes o pequeñas, ya sea por un trabajador
o por mil. Este conflicto, también lo vamos a ganar, y si a algunos les ha
parecido excesivo, que se preparen porque esto es solo el principio…